viernes, 8 de noviembre de 2013

Miedo y asco en Los Álamos.

Hola criaturillas!
Después de dos semanas sin escribir nada porque no tenía ganas, podría haber dicho cualquier cosa pero esta es la verdad, aquí vuelvo de nuevo. Como lo prometido es deuda, el otro día quedé con mi vecino para salir un rato y que se le pasara la tristeza por el rechazo sufrido. Se puso sus mejores galas y yo mis mejores harapos y salimos de caza. Bueno, más bien salió él de caza, yo solo era su guía espiritual y conductor no bebedor. El sitio al que acudir se decidió rápido. Él quería ver carne y no hay otro sitio mejor para eso que Los Álamos. Ha habido noches en las que he visto más ropa en un desfile de Victoria's Secret que en cualquiera de esos chiringuitos. Nada más llegar nos dimos cuenta que nuestro plan de movernos de un sitio a otro no nos iba a valer porque todo el mundo había decidido ir al mismo. Qué de gente había. Pero bueno, así al menos subirían algo las posibilidades. La noche empezó bien, la camarera nos hablaba. Parece que no, pero ya es algo. A mi vecino lo dejé a su aire, no quería estropearle la caza con mi imponente presencia. Yo cuando vengo a estos sitios ya estoy acostumbrado al efecto que produzco. Solo un par de valientes y arriesgadas mujeres se han atrevido a acercarse en mi vida. El resto, de lo nerviosas que se ponen, no son capaces de hablarme o de mirarme. Pobres, deben verme tan inaccesible para ellas que ni lo intentan. Porque tiene que ser eso, no?
Estaba yo en la barra con mi Nestea en vaso ancho con hielo -nótese el parecido con el whiskey a palo seco- cuando me di cuenta de un hecho insólito en la Naturaleza. El hombre involuciona durante el cortejo! Sí! Cuando el macho del Homo Sapiens se deleita con el bamboleo de las caderas de la hembra, da unos pasos atrás en la evolución y se transforma en Homo Erectus! Es algo increible si no lo hubiera vivido...
Volví a caer en la cuenta de que no sé ligar en estos sitios. Cómo se hace? Qué le dices a alguien así de primeras? Hola? Que típico, no? Es que no se me ocurren nada más que tonterías. Algo así como: hola, vengo del planeta Agostini y esta es mi única noche en La Tierra. Te he elegido a ti como compañera de aventuras... Nah, no funcionaría.
Enfrascado como estaba en mis pensamientos no me había dado cuenta de que mi pobre vecino no daba ni una. Ya estaba viendo que nos tendríamos que quedar hasta el final y ver si conseguíamos algo yendo de coche escoba recogiendo lo que quedara. Pero amigos, si nos dio asco la actitud de algunas prepotentes durante la noche, lo que vimos a la hora de cerrar nos dio miedo. Grupos de chicas borrachas y con el maquillaje en horas bajas tambaleándose de un lado para el otro. Dignas candidatas a extras en películas como REC o series como The Walking Dead. Por supuesto aconsejé a mi vecino no mirarlas directamente, el mero contacto visual y te llevan al otro lado. No se salvaban ni con el efecto animadora...
En fin, después de una noche tan desastrosa nos fuimos a desayunar tranquilamente y a reirnos de todo. Al fin y al cabo solo vivimos una vez y lo mejor que podemos hacer es reir como si no hubiera un mañana.
A más ver, arre arre unicornio...

martes, 5 de noviembre de 2013

Another brick in the wall...

Hola criaturillas!
Desde hace una semana estoy ayudando a una amiga psicóloga con unos chabales que sufren acoso en el instituto. Son dos chicos de 16 y una chica de 15 años. Se está haciendo terapia de grupo y mi labor, junto a otra muchacha más, es hacerles ver que se puede superar. No sufren violencia física pero sí psicológica, que en algunos casos puede ser peor y llevar al suicidio. A nosotros nos ha llamado para contarles nuestra experiencia y tener un punto de vista quizá diferente del terapeuta.
No sé realmente como ayudarlos porque lo mio quizá no fue para tanto. Es cierto que mis primeros años de instituto no fueron precisamente un paseo por el campo pero tampoco fueron malos en lineas generales. Se reían de mi y la mayoría del tiempo me trataban como a un trapo pero no me importaba. Y no me importaba porque yo había decidido que fuera así. Los primeros meses lo pasé mal. Cuando alguien te menosprecia te molesta, pero cuando lo hace alguien a quien consideras amigo te duele. Mucho. La diferencia con alguna otra gente es que yo decidí transfornar ese dolor en rabia, en enfado. Pero no con los demás sino conmigo mismo. Acaso iba a dejar que lo que dijeran o hicieran unos niñatos me afectara tanto? Que me hicieran dudar de mi? La respuesta la tuve muy clara. NO. Y desde ese día la cosa cambió. Os parecerá una tontería pero ver tanto anime y manga por una vez me sirvió de algo. Pensé que la mejor manera de hacerlo era emular a los protagonistas de mis mangas favoritos, es decir, tomarme esa etapa en el instituto como una prueba que tenía que superar. Convertir todo en un reto. Y ya fuera por eso o cabezonerío lo logré. Y solo había un final posible, hacerme más fuerte. De todo eso aprendí que uno de los grandes pasos que puedes dar para ser feliz es que no te importe nada lo que otros opinen o digan de ti. Y por supuesto ser el primero en reirte de ti mismo. Todos esos que creen que se están riendo del débil no saben que en realidad ellos son los débiles. Los que buscan refugio y apoyo en el grupo para sentirse alguien. Los que buscan ser otro ladrillo más en el muro. Otra oveja más en el rebaño. Los que piensan que ser diferente es malo. Y qué tiene de bueno ser como los demás? Acaso aún hay gente que piensa que lo fácil es ser diferente? Pues no. Despierta. Lo realmente difícil en esta vida es ser diferente, ser uno mismo. Lo fácil es lo otro. El sistema te empuja a ello. Estudia esto, trabaja en aquello otro, aspira a ser como aquél, desea esto y despues esto otro, ten una casa, cásate y ten hijos, se una persona mayor y responsable. Todo eso es lo fácil. Pues lo siento pero ya me he cansado de jugar.
En fin, que se me llevan los demonios jajajja. Pues eso, que lo que voy a intentar aportarles es la idea de que ser raro, diferente o como lo queráis llamar no es malo, al contrario. Eso los convierte en especiales y únicos.
A más ver... Arre arre unicornio!